ESPECIAL MARTIN SCORSESE
Las películas tocas nuestros corazones, despiertan nuestra visión, y cambian nuestra forma de ver las cosas.
Mi vida ha sido el cine y a religión. Eso es todo. No hay más.
Martin Scorsese.
La concesión del Premio Princesa de Asturias de las Artes a Martin Scorsese ha servido para que mucho se hablase y escribirse sobre esta grandísima figura del cine moderno, aparte de poder tenerle en nuestra tierra y escucharle en directo.
El destaca no solo como cineasta, sino por sus extensísimos conocimientos sobre cine, lo cual no es de extrañar porque ya de niño se pasó horas y horas en las salas de exhibición debido al asma que sufría y aunque le impedía jugar con los críos de su edad.
Hay como no podía ser menos, muchísima bibliografía y muchos documentales sobre él, de los que ahora destacaré un libro de gran formato de la Editorial Blume, “Martin Scorsese. Una retrospectiva” del periodista Tom Shone (ojo, es de 2014 por lo que no podremos ver nada de sus últimas pelis), en el que podemos encontrar una extensa selección de fotografías que son una manera fantástica de recordar sus películas, al tiempo que nos recuerda la famosa anécdota de la infancia del director, cuando estaba obsesionado por conseguir en la Biblioteca Pública de Nueva York el préstamo del único libro de cine que había (que siempre lo alquilaba primero que el otro chiflado del cine, Paul Schrader, que luego haría el guion de “TAXI DRIVER”), libro que era ilustrado y aquellas imágenes causaban un efecto hipnótico en el futuro realizador, con tal obsesión que el mismo confesó que acabó llevándose furtivamente algunas de sus páginas a casa.
Es un representante del cine moderno, porque es fruto de las enseñanzas reguladas sobre cine, en su caso en la reputada Tisch School of the Arts de Nueva York. Y en su filmografía (que tocó muchos géneros con una selección muy personal de los temas) hay una serie de obras maestras que pasaran a la historia del séptimo arte sin duda alguna (“TAXI DRIVER”, “TORO SALVAJE”, “LA EDAD DE LA INOCENCIA”y “CASINO” son para mí las mejores; sin olvidar un fantástico homenaje al cine como es la menos famosa “HUGO”, que a veces es despreciada llamándola película infantil), pese a lo cual le costó conseguir el oscar al mejor director (había estado nominada seis veces antes), pues hubo de esperar hasta 2006 con “INFILTRADOS”con la que cumplió otra ambición como era poder dirigir a Jack Nicholson(personalmente no la considero al mismo nivel que las citadas antes, aunque es un excelente film).
Pues bien, para no perderse en una misión imposible, centraremos este homenaje al gran director con los tres artículos que siguen, el primero de quien esto escribe relacionado con su experiencia con uno de los actos que la Fundación Princesa de Asturias hizo con motivo de los premios.
1. “TAXI DRIVER SINFÓNICO”.
Esta parte ya está publicada en el BLOG.
2. DOS MAGNIFICAS COLABORACIONES.
Es un inmenso placer poder traer a estas páginas los dos artículos que seguirán publicados INDEPENDIENTEMENTE, de la mano de dos grandísimos juristas que son al tiempo dos cinéfilos de cuidado, que te pueden dejar apabullado por sus conocimientos y su amor al cine.
Bernardo Donapetry, presidente de la Sección Octava de nuestra audiencia, nos lanza un chorro de documentación que yo diría es sensacional, al que solo quiero aportar una pequeña nota a pie de página y la anterior cita del libro gráfico de Tom Shonecuya foto pueden ver los lectores.
Rafael Martín del Peso, presidente de la Sección 7ª de la misma Audiencia, nos regala uno de sus entretenidos y acertados comentarios de una de las películas quizá menso famosas del director, lo que no quita para que sea excelente y se deje ver con máximo interés, sumergiéndolos en la tensa historia de la mano del sensacional personaje que construye Robert De Niro(que acojonaba al propio director con sus tatuajes -hechos con tintes vegetales pero que tardaron luego meses en quitarse del todo-, su dura preparación física para moldear el cuerpo -algo habitual en el actor- y completando el aspecto físico incluso en la dentadura con un coste de 5.000 dólares y luego 20.000 dólares para ponerlo todo bien al acabar el rodaje), película que el director dudaba si hacer, pero le pasó los trastos su amigo Spielberginsistiendo que lo aceptase, pues iba a ser una película taquillera y eso le permitiría poder acceder a otros proyectos más personales después. Y no podemos olvidar que la película es un remake de otra película de 1962 “El CABO DEL TERROR”, del excelente artesano el inglés J. Lee Thomson cuya filmografía contiene cintas memorables como “LOS CAÑONES DE NAVARONE”o“EL ORO DE MACKENNA”, protagonizada por Gregory Pecky Robert Mitchunen los papeles principales. Desde luego, las dos películas son buenísimas y merece la pena verlas, sin necesidad de odiosas comparaciones.
Y termino con mi entusiasmado agradecimiento a los citados colaboradores.
Gijon, diciembre 2018.
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